Según ha denunciado el responsable de cambio climático y energía de
Greenpeace, Mariano González, millones de seres humanos serán obligados
a desplazarse de sus hábitats de origen por causas medioambientales. ”En
la medida en que no se frene el calentamiento global del planeta, la
cifra de refugiados climáticos se verá incrementada dramáticamente,
pudiendo llegar hasta los 200 millones en el año 2050”.
De cumplirse las previsiones, el aumento del nivel del mar por el cambio
climático, podría afectar a un 25 % de la población mundial,
especialmente la que vive a menos de 25 metros de la línea costera, lo
que obligaría a tener que abandonar sus hogares.
El concepto de “refugiado climático” ha empezado a ser introducido por
las Naciones Unidas, “pero después no se recoge en el derecho
internacional como una de las causas que dan acceso a un estatuto de
protección”.
Según González, la política del avestruz que está aplicando la comunidad
internacional es la responsable de que el acuerdo de cambio climático
aprobado recientemente en París no mencione expresamente el término de
refugiado climático y, por contra, opte por hablar de derechos humanos,
especialmente en lo que se refiere a los refugiados que huyen de las
guerras.
En estos momentos estamos siendo testigos de un éxodo humano provocado
por las guerras, pero “aunque el tema de los refugiados sirios no se
deba a un problema climático, sí que nos tiene que servir como ejemplo.
Además hay que reconocer que previamente hubo una sequía muy fuerte en
el país que hizo que mucha población rural tuviera que huir hacia las
ciudades”, ha manifestado.
"El Cambio Climático ya está aquí y está afectando con más severidad a
las naciones más pobres, donde la gente es más vulnerable", ha afirmado
Raquel Montón, responsable de la campaña de cambio climático de
Greenpeace. "Las negociaciones gubernamentales deben tener en cuenta a
los millones de personas que lo perderán todo por los desastres que el
calentamiento global provocará en los próximos años".
"Si ahora no hacemos un esfuerzo para reducir las emisiones lo antes
posible, los impactos serán mucho peores en las próximas décadas y no
habrá “arca de Noé” lo suficientemente grande para los refugiados por el
Cambio Climático", ha afirmado Raquel Montón. "La prioridad es mantener
el aumento de la temperatura global por debajo de los 2 grados
centígrados respecto de los niveles pre-industriales y esto significa
realizar una reducción rápida y a gran escala de las emisiones desde
ahora hasta mitad de este siglo".
Greenpeace demanda a todos los mandatarios internacionales que tomen en
serio su responsabilidad y emprendan un camino que conduzca a reducir
las emisiones para proteger el clima y a millones de personas de todo el
mundo. "Para que este esfuerzo tenga éxito debemos lograr que Estados
Unidos abandone su intransigencia y su negativa a ratificar el Protocolo
de Kioto lo antes posible". "Todos los países tienen que hacer frente al
desafío necesario que pasa tanto por cambiar el modelo energético y
sustituir los combustible fósiles por energías renovables como por
fomentar el ahorro y la eficiencia energética. Concluyó.
Fuente: Greenpeace.
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